Por Raquel Rozalén
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9 de diciembre de 2023
El tiempo en que vivimos es, en muchas ocasiones, una lucha contra el propio tiempo. Nos sentimos desbordados por acontecimientos del pasado y superados por la incertidumbre de ese tiempo que está por venir y lo que esperamos que traiga consigo. Andamos sedientos de nuevas experiencias y estímulos que nos llegan desde las pantallas a cada segundo. Y la sensación es de vacío a pesar de estar llenos, rebosantes de información y obnubilados por las múltiples opciones y alternativas que la vida despliega ante nosotros. Todo esto sucede mientras estamos pendientes del reloj. En la mitología griega este tiempo lineal que, se nos escapa continuamente de las manos, que pasa y se va consumiendo estaba representado por el Dios Cronos. Por contrapartida, los griegos hacían referencia a otro tipo de tiempo que representaba los momentos en que sucedían las cosas importantes: era el denominado Kairós. Reflexionando sobre lo que se vive y experimenta en una sesión de Focusing y, sobre todo, lo que nos sucede a nivel interno, me dispuse a buscar una palabra que definiera ese tiempo que transcurre movido fundamentalmente por nuestra fuerza vital. Un tiempo de vida en su acepción más pura y auténtica. Y así es como, más allá del Cronos y el Kairós, descubrí la palabra "aeon", un vocablo inglés, derivado del latín tardío y cuyas raíces vienen del griego. Y de esa serendipia surgió la esencia de "Aeonfocus". Cómo un fósforo que en un chasquido se enciende de repente, este término movilizó algo en mí: me hizo descubrir la necesidad de acompañar a las personas a indagar en su sabiduría interna y así reivindicar la respuesta que atesoramos y que busca ser desvelada. Focusing es el paso que implica simbolizar y conceptualizar lo que está ocurriendo, que nos permite conectarnos con la fuente de la vida y nos permite sentir alivio con lo que expresamos. Así nació este proyecto que busca despertar en ti la capacidad de conectar con una vivencia sentida para generar un tipo de comprensión que te permita solucionar los retos de la vida. Y es que, como señalaba C. Rogers (1961) quien junto con E. Gendlin desarrolló la terapia experiencial, es justo cuando nos aceptamos tal y como somos cuando podemos cambiar. Vale la pena intentarlo y recorrer este camino de autoconocimiento para lograr los cambios que necesitamos y adoptar una actitud personal más nutritiva y enriquecedora. Aeon es mi forma de decirte: "Tú puedes".